Polémica generó la interceptación de un remolcador chileno que navegaba dentro de la Zona Económica Exclusiva de Argentina, por navegar desde las islas Malvinas a Montevideo sin autorización trasandina.
De acuerdo a la información de este país, los buques navegaban dentro de la Zona Económica Exclusiva, a velocidad reducida, a 245 millas náuticas de la costa, frente a la ciudad de Comodoro Rivadavia.
Y según un decreto interno y una ordenanza de la Prefectura Naval Argentina, los buques que transiten en zonas entre el continente y las islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur, deben solicitar una autorización previa.
Para el exembajador y militante Demócrata, Jorge Tarud, esta normativa interna pugna con el derecho a la libre navegación en la Zona Económica Exclusiva, por lo que llamó al Ejecutivo a pedir explicaciones al Gobierno trasandino.
Jorge Guzmán, exdiplomático y académico de la Universidad Autónoma, coincidió con Tarud, enfatizando en que el hecho ocurrió dentro de la proyección de la zona económica exclusiva de las Islas Malvinas, que Argentina considera territorio propio.
Desde la comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara, el diputado del Partido Ecologista Verde, Félix González, dijo que lo peor sería sobre reaccionar, por lo que pedirán al canciller Alberto van Klaveren mayor información sobre el tema.
Desde La Moneda, la ministra vocera de Gobierno, Camila Vallejo, dijo que el ministerio de Relaciones Exteriores está recabando antecedentes para tener “información clara, certera y oficial” y así dar “mayor tranquilidad”.
La Cancillería, en tanto, le pidió a la Armada un “informe técnico” donde se detalle todo lo sucedido con la “interceptación” de la embarcación chilena por parte de la Prefectura Naval trasandina.
Coincidentemente, la subsecretaria de Relaciones Exteriores, Gloria de la Fuente, se encuentra en Argentina participando del Comité Permanente de Seguridad (Comperseg), instancia en la que también participará el subsecretario de Defensa, Ricardo Montero.
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