Luego de tres jornadas de juicio oral, un sujeto fue sentenciado en las últimas horas a 15 años de cárcel por su responsabilidad en los sistemáticos ataques sexuales contra su sobrino en Dalcahue.
Desde que apenas tenía 7 años se extendieron los ultrajes contra la víctima. Una pesadilla que comenzó el 2017 y que fue develada el 2019 por el pequeño a su familia. Sus cambios de conducta también advirtieron del impacto de estas vejaciones.
El 13 de mayo del 2021 fue formalizado el auxiliar del transporte público y desde entonces se potenciaron las diligencias que permitieron sustentar su autoría en el delito de violación impropia, luego de la audiencia realizada en el Tribunal Oral en lo Penal de Castro.
Durante la sesión, el fiscal Enrique Canales presentó cargos por dicho ilícito, como también por abuso sexual y producción de material pornográfico infantil. Por los dos últimos hechos delictivos el isleño terminó siendo absuelto.
No obstante, el persecutor valoró el dictamen de la sala que acreditó la dinámica de las violaciones, que se gestaban “en los momentos en que el imputado aprovechaba las visitas que la víctima realizaba a su domicilio en Dalcahue, durante las vacaciones de invierno y verano”.
Dentro de los medios probatorios expuestos ante los sentenciadores, el jurista relevó la evidencia “testimonial, pericial, de los programas DAM (Diagnóstico Ambulatorio) y PRM (Reparación en Maltrato), del perito sexólogo del Servicio Médico Legal (SML) de Castro y otro dermatólogo del Hospital de Castro”.
El representante del Ministerio Público también destacó las pesquisas de la Brigada Investigadora de Delitos Sexuales (Brisex) de Ancud.
“Todas estas pruebas corroboraron el relato que la víctima entregó a los jueces, a través de una sala especial y por medio de un entrevistador calificado como exige la ley, que busca evitar su revictimización”, aclaró Canales
(Gentileza de soychiloe)
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