Un amplio operativo de búsqueda, que incluye drones, buzos y equipos de rescate en zonas agrestes, se concentra en el sector de Villa Panorámica, en Rahue Alto, Osorno, para dar con el paradero de Alejandro Gallardo Montecino, de 63 años, a quien se le perdió el rastro hace 15 días. La familia del hombre, quien padece diabetes y demencia senil, clama por respuestas y no descarta ninguna teoría sobre lo ocurrido, mientras la Policía de Investigaciones (PDI) y equipos de voluntarios como la Unidad de Rescate Acuático (URA) y UAV Chile, peinan el área donde fue visto por última vez.
Una carrera contra el tiempo es la que se vive desde hace 15 días en Osorno. Familiares y un completo equipo de búsqueda y rescate, compuesto por cerca de 35 voluntarios, trabajan incansablemente para encontrar a Don Alejandro Gallardo Montecino, un adulto mayor de 63 años que desapareció desde el sector de Chauracahuín, en Rahue Alto. El foco del operativo se ha centrado en los últimos días en las inmediaciones de la Villa Panorámica y el Quinto Centenario, zonas de geografía compleja, con quebradas y densa vegetación.
La operación es liderada en terreno por la Unidad de Rescate Acuático (URA), en coordinación directa con la Brigada de Homicidios de la PDI, que está a cargo de la investigación oficial del caso. “Estamos trabajando desde el primer día”, señaló el comandante de URAT, Cristián Mancilla, quien detalló que el despliegue incluye personal especializado en rescate vertical para los barrancos, buzos revisando las riberas del río Damas y el uso de tecnología de punta. “Se encuentra UAV Chile, que en estos momentos están elevando un dron, están haciendo una fotometría total de la zona”, explicó el comandante, refiriéndose a la técnica que permite crear mapas detallados del terreno para identificar puntos de interés.
La decisión de concentrar la búsqueda en esta área se basa en el análisis de cámaras de seguridad y testimonios que la PDI ha recopilado, los cuales sitúan a Don Alejandro en las cercanías. “Se pierde la visión en una calle no muy lejana a esta zona”, indicó el líder del rescate. La hipótesis principal es que, debido a su estado de salud y la dificultad del terreno, “la persona pudo haber caído o se encontraría entre medio de este matorral”.
Para los hijos de Alejandro Gallardo, cada día que pasa es una tortura. Su desesperación es evidente, así como su determinación por encontrar a su padre. “Queremos saber su paradero porque ya van 15 días y no tenemos ni un rastro”, expresó Freddy Gallardo, uno de sus hijos. La incertidumbre los ha llevado a considerar los peores escenarios: “No sabemos si está tirado o si lo o está quizás en una casa, enterrado. Ya a esta altura del partido ya me imagino cualquier hipótesis”.
El último contacto visual que la familia tuvo con él fue el lunes previo a su desaparición. Freddy recuerda haberlo visto desorientado a través de la ventana de su dormitorio. La última vez que fue visto por vecinos fue el martes siguiente a las 23:00 horas, y la denuncia por presunta desgracia fue interpuesta por una tía el día miércoles.
Don Alejandro, de 63 años, mide aproximadamente 1.60 metros, es de contextura delgada y cabello canoso. Una característica física distintiva es que cojea de su pierna derecha. Al momento de su desaparición, vestía un pantalón azul oscuro, un polar gris, un “peludito” azul marino y, posiblemente, un jockey rojo con un logo blanco.
Leave a comment